viernes, 24 de abril de 2009

Un año, una rosa y un libro

Felizlandia podría llamarse ese conjunto de aceras, edificios, parques y gentes que configuran mi pueblo. Úlitmamente, pese a existir algún que otro altercado callejero, paseo, sonrío y miro a los niños- ¡miles de pequeños cada cual más gracioso!- por toda esa espontáneidad que derraman. Ellos, nunca serán tachados de locos por hacer y decir cosas imposibles... y como les envidio por ello. Pueden preguntarse por qué el reloj gira a derechas y no a izquierdas, o decir los números digitales uno por uno al no entender como llaman diez al veintidós, que no pasará nada, todo es normal. Luego llega mamá con el libro "el porqué de las cosas" y se acaba el cuento... Aunque en realidad así es como empieza el mío, pues era mi madre, mi duda y mi pueblo.
Yo me pregunto si mi realidad me hace feliz, o soy feliz y todo me parece perfecto... sonrío si hablo, si voy contigo de la mano, si te explico para quién es la rosa y para quién este cuento; no conoces mis letras, pero yo te las muestro, simplemente porque quiero. Así como seguir respirando en cada rincón de este lugar y no olvidar su aroma de inocencia; y por las noches, el olor de sus silencios.
Tras un año, hoy duermo en la misma cama, de la misma calle, pero por ti, de otro lugar más bonito y lejano. El infinito, así lo llamamos.






Hoy, es el aniversario de mi blog, y os dedico este texto a todos quienes me lean, o me hayan leido alguna vez.
http://mon-petit-mot.blogspot.com/2008/04/conflicto-eterno.html


Feliz día del libro a todos :)

4 comentarios:

Jesús V.S. dijo...

:D ¡Por fin! Una demora bastante larga... pero bueno, me ha gustado la similitud de los niños con la vida. Esos locos bajitos, que decía alguien...


Un besote, me incluyo dentro de esa lista que nombras. De principio a fin. :D

Ari Schreiber dijo...

VAYA! MENOS MAL!!!... Feliz landia...niños...vida :)

EL SUEÑO DE GENJI dijo...

Con mucho retraso, mucho y lo siento, gracias Mot.

Tienes tanta razón. Envidio la fresca inocencia de los niños. Su mirada trasparente y pura. Su facilidad para ver un dragón en una escoba y una cueva donde para nosotros sólo hay dos cojines apoyados...

Luego nos hacemos mayores, maduramos y simplemente la cagamos...
Y tanto que la cagamos.

Un beso y un gran abrazo amiga¡¡

Anónimo dijo...

Aquí otra seguidora de tus escritos... no te preocupes no los olvidare...

Mrs. Hippie