miércoles, 8 de junio de 2011

Peterpanianismo

No puedo luchar contra el tiempo, contra la sucesión de hechos que imparables dejan sobre mi una sutil huella. Soy incapaz de evitar crecer y contaminarme con prejuicios, ideas... el exceso de razón de nuestra propia condición humana. Es imposible evitar comparar lugares maravillosos, elaborar una opinión equivocada sobre paraísos, transmitir ideas imperfectas sobre espacios imposibles de deshacer en palabras...

Somos responsables de nuestra propia conciencia que aumenta y pesa con el tiempo... Sin embargo, nada de esto es una excusa, solo características intrínsecas de la vida, que cada uno interpreta a su manera.

Profundizar en la idea "peterpaniana" de soñar y tener una ilusión infinita, se convierte en prioridad cuando el aniversario acecha, cuando dejas de ser estudiante, cuando aumentan tus compromisos económicos, sentimentales, morales...

En busca de esa simbiosis entre sueño y realidad, placer y obligación, seguiré desahogándome en este espacio donde a veces la locura de una idea, toma forma...

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Ya era hora. Las desapariciones voluntarias ayudan mucho si en ese tiempo recorres tu espacio interior. Puedes hasta volverte loco/a. Pero la metamorfosis ya estaba hecha porque la mariposa, Volvoreta, tú, es el resultado y no el proceso. Aunque cambies de un estilo de sueño-casi onírico, Violetas imperiales- a otro de aparente seguridad. ¿El mundo de Guermantes en las orillas del Henares? No está mal.
Sigue escribiendo…

Loren dijo...

Somos reos del tiempo. Él nos cincela y desgasta, nos controla a su antojo por mucho que opongamos resistencia. Pero tenemos como arma la literatura. Somos unos afortunados. :)

Hace mucho que no sé de ti.
Espero que todo vaya bien.

Un beso.

Jesús V.S. dijo...

Y afortunados de poder contar ese paso del tiempo de de manera tan sutil.

Un besote.

Y sí, como dice el primer comentario, sigue escribiendo... ;)